Juan José Arreola celebra en Flandes su centenario
Juan José Arreola estuvo en Flandes dos veces, en 1987 y en 1993, en este último caso con motivo de Europalia, la bienal cultural de Bruselas dedicada en esa ocasión a México. Pues bien, en 2018, centenario de su nacimiento, ha aparecido por primera vez en neerlandés su obra Confabulario, con el título Het wonderbaarlijke milligram en andere fabels, literalmente El miligramo prodigioso y otras fábulas, a principios de año; y a finales de septiembre su libro Bestiarium (en este caso por primera vez en libro) ambos traducidos por Guy Posson. En cuanto al primero, tanto el traductor como el editor, Martijn Couwenhoven, tuvieron la amabilidad de aclararme, durante la presentación de Amberes a la que asistí, en la librería De Groene Waterman el 3 de febrero de este año, por qué eligieron ese título: La palabra “confabulario” puede conllevar, en efecto, unas resonancias a género medieval de las que querían huir. Además, añado yo, la familia de palabras en español es relativamente frecuente, con sentidos varios, por ejemplo relacionados con la conspiración, mientras que en neerlandés, al faltar estos significados, la palabra queda reducida a la acepción de un síndrome psiquiátrico. Optaron, en consecuencia, por elegir uno de los cuentos y recoger el sentido original con la muletilla “y otras fábulas”. Dudaron entre “El guardagujas” (De wisselwachter en neerlandés) y “El prodigioso miligramo”, probablemente los dos cuentos más conocidos y estudiados del libro. Tampoco tuvieron en ningún momento, ni traductor ni editor, la intención de sugerir una referencia que evocara La oveja negra y otras fábulas de Augusto Monterroso o cualquier otra obra.
El libro empieza, como es tradición, con el corto texto autobiográfico que se suele encontrar con el título De memoria y olvido, aquí titulado simplemente Autobiografie. En el índice nos aclaran bajo esta palabra que se trata de un Voorwoord door Juan José Arreola, es decir, Prólogo, por Juan José Arreola. A continuación los cuentos y finalmente un epílogo del traductor, de casi 20 páginas, en el que relata, con claro cariño, su relación personal con Arreola.
El segundo libro empieza con un prólogo de Annelies Verbeke, autora de novelas, cuentos, obras de teatro y guiones cinematográficos y una de las figuras prominentes del panorama literario flamenco. Después recupera tanto los dibujos de Héctor Xavier (que dieron origen al primer y efímero título de esta colección, “Punta de plata”) como el sabrosísimo texto de José Emilio Pacheco “Amanuense de Arreola”, aquí traducido como Ik was de notulist van Arreola. En este caso no se trata de la primera traducción, aunque sí en un libro independiente. En el epílogo a Het wonderbaarlijke milligram en andere fabels Posson dice que Theo Hermans publicó su traducción de Bestiario en la revista literaria Mandala.
El traductor se ha basado en la edición antológica del Fondo de Cultura Económica, de 1995. Es un veterano experto en literatura latinoamericana, quien, entre otras cosas, ha colaborado con diferentes periódicos y con la radio y la televisión públicas haciendo entrevistas a numerosos escritores latinoamericanos. Es uno de los fundadores, en 1990, del Centro de Estudios Mexicanos de la Universidad de Amberes y ha traducido a neerlandés también a otros autores como Octavio Paz, Alfredo Bryce Echenique, Julio Ramón Ribeyro, Roberto Juarroz, Antonio Porchia y Juan Gelman. Pero no solo eso: también fue amigo personal del propio Arreola. Su primer contacto data de 1985, cuando Posson fue a México con el encargo de hacer entrevistas para el programa de la televisión pública Wie schrijft die blijft (Quien escribe permanece). Le hizo una a Arreola en casa de su hijo. El entrevistado le consiguió otra con el esquivo Juan Rulfo, quien murió en enero del año siguiente.
Dos años antes de la muerte de Arreola, en 1999, Posson pudo despedirse de él en México. En 2012 intervino en el V Coloquio Arreolino, celebrado en la capital y en Zapotlán, hoy oficialmente Ciudad Guzmán, donde nació el escritor mexicano. En aquella ocasión, Orso Arreola, hijo del escritor, declaró al periódico local El Juglar que Posson tradujo, a excepción de La Feria, toda la obra de su padre al neerlandés. Los libros han sido bien acogidos. Por suparte, Verbeke dijo después de leer Het wonderbaarlijke milligram en andere fabels: “Su vocabulario es peculiar y certero. Escribe de manera intensa, y deja huella. Además no es raro que te haga reír mucho. Ha sido un deleite para mí y estoy deseando que haya más”.
El traductor supera en los dos libros con brillantez el reto, nada fácil, de trasladar a neerlandés el sabor y el ritmo de la prosa de Arreola. Una característica recurrente en las publicaciones que por aquí hablan del primer libro (recordemos que Bestiarium acaba de salir) es la comparación con autores europeos como Franz Kafka o Marcel Schwob (quien, además de ser uno de los maestros reconocidos por Arreola, da nombre a una subvención recibida por el editor). Al mismo tiempo inciden en la diferencia de Arreola con los escritores latinoamericanos más famosos (Mario Vargas Llosa, Isabel Allende, Gabriel García Márquez), y la similitud (por contraste, quizá) con Jorge Luis Borges y Julio Cortázar. Todo esto ha sido señalado por el traductor en su epílogo.
Sin embargo, debería haber alguna referencia en publicaciones especializadas a otros autores latinoamericanos, como Adolfo Bioy Casares, Juan Carlos Onetti, Augusto Monterroso o, por hablar de escritores contemporáneos, Andrés Neuman, Anamaría Shua o Fernando Iwasaki. Se ve que la literatura latinoamericana no es tan conocida ni tan estudiada como debería en esta parte de Europa, en gran medida por culpa de la escasez de traducciones. Afortunadamente, en el caso de Arreola y gracias a la actuación de su amigo Posson, se va poniendo remedio.
Enrique Morales Lara es profesor de español en dos escuelas de idiomas de Lovaina, Bélgica: Mobyus y CLT (esta última asociada a la Katholieke Universiteit Leuven). Es Doctor en Filología Clásica por la Universidad de Cádiz. Ha publicado una veintena de artículos sobre latines y un par sobre docencia de español; también (micro)relatos en diferentes revistas (Visor Literaria, Narrativas, Aurora Boreal, Gibralfaro) y traducciones de poesía.